CSDDD: de qué se trata y cómo impacta en las empresas de LATAM

El Parlamento Europeo aprobó el pasado 24 de abril la Directiva sobre diligencia debida de las empresas en materia de sostenibilidad o, como se la conoce por sus siglas en inglés, CSDDD. Esta directiva marca un antes y después en la regulación de las prácticas empresariales de la Unión Europea y establece una nueva tendencia en materia de sostenibilidad para el resto del mundo. Descubre más sobre la CSDDD y conoce cómo impactará a las empresas de Latinoamérica. 

La Directiva sobre diligencia debida de las empresas en materia de sostenibilidad resulta un hito en pleno proceso de transformación sostenible. Esta directiva, que entrará en vigor aproximadamente en el tercer trimestre de 2024 y afectará a más de 5.000 organizaciones, impone a las empresas obligaciones significativas para abordar los impactos adversos en los derechos humanos y en el medio ambiente que podrían derivarse de sus operaciones, de sus filiales y, crucialmente, de sus cadenas de suministro. Las empresas europeas deberán prepararse para cumplir con esta normativa y poder así sostener su actividad.

¿Qué obligaciones establece la CSDDD para las empresas?

La CSDDD introduce un marco legal armonizado para que las empresas realicen la debida diligencia en derechos humanos y medioambientales, algo que antes no estaba estandarizado en toda la Unión Europea. Establece requisitos claros para las políticas de debida diligencia, incluyendo la necesidad de integrar la debida diligencia en la estrategia corporativa y considerar las consecuencias en derechos humanos, cambio climático y medio ambiente en la toma de decisiones empresariales.

Específicamente, insta a las organizaciones a:

1. Contar con una política de diligencia debida.
2. Determinar los efectos negativos reales o potenciales en los derechos humanos y el medioambiente.
3. Prevenir y mitigar los posibles efectos negativos.
4. Establecer y mantener un procedimiento de reclamación.
5. Supervisar la eficacia de la estrategia y las medidas de diligencia debida.
6. Comunicar públicamente sobre diligencia debida.
7. Adaptar un plan de transición climática conforme al Acuerdo de París y con el objetivo de limitar el calentamiento global a un máximo de 1,5 °C.

¿Cómo afecta la CSDD a las empresas de Latinoamérica?

Que esta directiva se haya aprobado en Europa no quiere decir que no impacte en América Latina. La CSDDD sí impactará en un gran número de empresas de la región que deberán transformarse para continuar su actividad. Javier Slythe, máster en Ingeniería Ambiental y docente de doinGlobal explica la razón y profundiza sobre la forma en que esta normativa aplicará a las empresas latinoamericanas:

“Aunque la CSDDD se enfoca en las empresas que están dentro de la Unión Europea (UE), también tiene implicaciones para las empresas latinoamericanas que operan en mercados europeos o que forman parte de las cadenas de suministro de empresas sujetas a esta normativa. Las empresas de América Latina que tengan un volumen de negocios significativo en la UE necesitarán cumplir con estos requisitos, lo que incluye la gestión de riesgos ambientales y de derechos humanos a lo largo de sus cadenas de valor.

Es importante tener en cuenta que el rol de América Latina en la cadena de suministros de la UE es amplio y diverso, englobando actividades como agricultura, ganadería y minería, entre otros. Esto implica que, si bien esta Directiva no aplica directamente a LATAM, las empresas que deban cumplir estos requisitos exigirán a sus proveedores información transparente y trazable para llevar a cabo el análisis de riesgos ambientales y sociales de cada una de las actividades desarrolladas en sus operaciones”.

¿Cómo pueden prepararse las empresas de América Latina para afrontar estas obligaciones?

Frente a una directiva tan importante con obligaciones tan específicas vinculadas a la sostenibilidad, la clave para una aplicación efectiva es el conocimiento. Es indispensable que profesionales, líderes y directivos incorporen saberes y herramientas para implementar estrategias sostenibles que no sólo permitan responder a esta normativa, sino que también garanticen resultados positivos para la actividad de la empresa. 

La CSDDD propone la integración de la sostenibilidad como un eje transversal a la estrategia empresarial, por lo que deberán aplicarse estos criterios en todas las áreas: finanzas, planes de negocios, recursos humanos, marketing, cadenas de valor, producción, etc. Esto significa que son todas las áreas en las que deberán actualizarse conocimientos para contribuir a su cumplimiento.

En doinGlobal la sostenibilidad siempre fue un pilar central para desarrollar nuestras formaciones, no solo por nuestro compromiso, sino también por que atendemos a las tendencias que serán claves en el futuro. Es por eso que contamos con diversas especializaciones y programas académicos sobre sostenibilidad que pueden contribuir a fortalecer las capacidades de profesionales y colaboradores en este contexto. Finanzas sostenibles, cadenas de valor, consultoría en sostenibilidad, innovación social y economía solidaria y gestión ambiental son solo algunos de los temas que abordamos en nuestras propuestas formativas.

La CSDDD marca un punto clave en el camino que se está recorriendo a nivel mundial para promover el desarrollo de las personas y proteger y preservar el medio ambiente. Ya sea de manera directa o indirecta, las empresas deberán alinearse a esta directiva y para hacerlo es importante saber cómo. El saber hacer permitirá a las empresas reducir riesgos, resolver desafíos y aprovechar los beneficios y oportunidades que ofrece la revolución de la transformación sostenible.

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